-Intermedio musical-

Extraño escuchar a los artic monkeys al lado de mi oficina.
Lo extraño. A todo él y su séquito de mujeres parlantes. Extraño su inmensa paciencia y mi afán de devorar algo que sabía no podía comer... Ni siquiera masticar.
Pero no lo vayas a decir muy alto, querido diario, no vaya a ser que se de cuenta, me pida explicaciones y yo me niegue profundamente fingiendo demencia y contándole que últimamente he tenido mucho trabajo.
Que personaje tan barato resulté.

Pero así es esto. Eso suele pasar cuando se pierde... y cuando se extraña ganar.

No hay comentarios: