Todo debería estar prohibido.

Entre las cosas que no me debieran estar permitidas hacer es la de llamar a celulares que extrañamente recuerdo de memoria cuando he bebido más de cinco martinis (porque después perdí la cuenta).

En serio querido diario, sabes que no miento.

Y entonces me habría estado prohibido llamarle y dedicarle esa canción cursi de Camila que dice: "Mientes, me haces daño y luego te arrepientes. Ya no tiene caso que lo intentes, no me quedan ganas de sentir. Llegas, cuando estoy a punto de olvidarte, busca tu camino en otra parte, mientras busco el tiempo que perdí, que ahora estoy mejor sin ti".

Pinche ardida.

Las canciones pop debieran estar prohibidas para las mujeres despechadas susceptibles a este tipo de eventos. Si ya sabemos que el amor es una mierda ¿Porqué nos gusta tanto revolcarnos en ella? ¿Sadomasoquismo? Tal vez.

Lo cierto es que no contestaste nada y como abogados que somos, aplicaré la negativa ficta: Si no me dijiste nada respecto a esa cursi canción quiere decir que te identificaste en ella y captaste el mensaje (ni tan)oculto que había y jamás me volverás a buscar en mi ostentosa oficina ni esperarás por mi en mi ostentoso auto... Si eres inteligente...

Cosa que, querido diario, dudo bastante.

Mientras haré esa nota mental de cosas prohibidas cuando bebes más de cinco martinis y pierdes la cuenta del número de tragos que el mesero guapo te ha servido, un tacón y la tarjeta de débito que cancelaste la semana pasada.

En fin.

Bienvenido seas 2011, a ver que nuevas cosas (hombres) nos traes.

1 comentario:

La Gloria soy yo . dijo...

Los bombones de chocolate deberían de estar prohibidos mi querida Dolores!!